Si, de nuevo calabacín y demás verduras frescas como las primer judías de nuestro huerto. La temporada de las verduras que tenemos sembradas está en su apogeo y como cada año surgen ideas para elaborar recetas diferentes y ricas. En esta ocasión un pastel de verduras variadas, o por decirlo de otra forma, verduras que estaban en la nevera y se han convertido en delicioso pastel que si lo hacéis, os recomiendo que lo comáis frio, que con estos calores es de agradecer y además queda bien.
Necesitamos para 6 personas:
- 400 gr de calabacín
- 100 gr de champiñones
- 150 gr de judías frescas
- 120 gr de zanahorias
- 150 gr de puerro
- 5 huevos
- un bote de nata ligera
- sal
- pimienta negra
- ajo en polvo
- nuez moscada
- aceite de oliva
Limpiamos las verduras y pelamos sólo las zanahorias y las partes del puerro que no sean tiernas. Quitamos la parte superior e inferior del calabacín. Cortamos las judías en trozos pequeños y las ponemos a hervir unos 8 minutos. Colamos y pasamos por agua fría. Cortamos el calabacín a dados pequeños y rehogamos en una sartén con un poco de aceite de oliva, sal y pimienta negra, sólo unos minutos, que quede al dente. Haremos los mismo con las diferentes verduras por separado, cada una necesita su tiempo. Batimos los huevos en un bol, añadimos la nata , la nuez moscada, el ajo en polvo y mezclamos las verduras que estarán frías. Comprobamos que la mezcla esté bien de sabor, a de ser suave. Volcamos la mezcla en un molde de plum cake de aproximadamente 25 centímetros, donde habremos puesto un papel para horno, de esta manera es muy fácil de desmoldar y queda entero. Llevar al horno precalentado a 180º unos 30 minutos, hay que ir mirando pinchando con un palillo para ver si el centro está cocido, ha de quedar jugoso y no seco. Dejar enfriar antes de desmoldar. Para cortarlo, hacedlo sin presionar, deslizando el cuchillo con suavidad para que no se os desmorone.
Origen de la receta; casera
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