Aunque me guste la carne de caza ya que desde pequeña era habitual comerla en casa, pues mi padre era cazador, los años pasan y las cosas cambian, y ahora ya nos es habitual el consumo de esta carne.
Hasta que suena el teléfono y me llama el bueno de Joan y me dice si quiero dos perdices recién cazadas. Para mí fue un sorpresa y una alegría inmensa. La verdad es que hacía tiempo que no las cocinaba y me hacía mucha ilusión, creo que la última vez que cocine perdices fué en el 2020 en dos ocasiones, las teneis publicadas Perdiz asada con salsa fría de limón y también hice perdiz a la menorquina .
Hoy os presento esta otra manera tradicional con la que disfrutamos de estas perdices. Gracias Joan 💓